Esta novela es una versión original y humorística de uno de los hallazgos que cambiaron la historia de la humanidad: el uso del fuego. A través de comparaciones, el autor recurre a un juego de contrapunto entre un pasado remotísimo y el presente cotidiano. Los personajes, construidos a la manera de los antihéroes: más con debilidades que con fortalezas, son puestos en la escena para que los lectores puedan asomarse al mundo que dio origen a lo que somos ahora, el de los cavernícolas.